Podemos decir como estudiantes de maestría en Orientación y Consejería,de acuerdo a la temática del trabajo en cada época y tradición, que el trabajo tiene época pre-civilizadas, se podía decir que guardaban relación con las tareas propias de supervivencia, que se diferenciaron un poco de las tareas del ocio pero su carácter forzado para sobrevivir las convertía estas tareas en el trabajo.
En Grecia y Roma. El trabajo es ligado a las divisiones sociales. Fue difícil en esta época precisar su significado. Porque el trabajo manual y los negocios estaban reservados para los esclavos, artesanos libres y extranjeros.
Concretamente el trabajo asimilado a las tareas manuales y mercantiles impuesto permanente sobre el individuo, es considerado una maldición la cual lo vemos hoy día como una esclavitud, cuando no se tienen condiciones mínimas aceptables. Se consideraba al trabajo diario, el físico, como una tarea rutinaria, despreciable, por su carácter impositivo, alejando las condiciones que promueven la virtud en este caso no era a la actividad que se ejerciera sino la imposición que ejercían los que imponían a los que ejercían.
Con el predominio de la tradición Judeo-Cristiana el concepto de trabajo varía. El trabajo impuesto sigue manifestando su parte negativa considerado fruto del castigo por el pecado original. Pero también se percibía el trabajo como algo positivo, como medio de cooperar con Dios en la salvación del mundo.
En cuanto en el Islamismo el trabajo es regido como una obligación social que hay que cumplir para estar bien con los demás y con Dios. Así mismo el trabajo para el Budismo se concibe como una actividad que desarrolla el carácter personal pero de acuerdo cuando las personas son capaces de comprometerse en tareas difíciles y que vencen la tentación que provoca las actividades placenteras y que no exigen sacrificios.
De acuerdo a la época del Renacimiento la concepción del trabajo se dan cambios profundos de la manera de concebir el concepto de trabajo, adquiriéndose el placer experimentado en la realización del mismo y es valorado también en si mismo cuando la persona disfruta y se realiza a través del mismo.
Con el nacimiento de la Reforma Protestante el trabajo y la Ética Protestante y calvinista del trabajo, el trabajo adquiere un carácter de obligación y deber de valor individual, contribuyendo el trabajo a la creación del Reino de Dios.
El trabajo es bueno y el trabajar duro mejor. De acuerdo a lo que manifiesta Lutero el trabajo se puede entender como un sendero hacia la salvación y por otro lado Calvino manifiesta que el trabajo es voluntad de Dios y que la riqueza acumulada a través de el trabajo es una virtud toda fuerza de trabaja dispuesta al sacrificio nos da una vida racional y de carácter burgués, considerándose el trabajo duro y la vida sobria generan el ahorro y la acumulación de capital donde cada persona debe trabajar para conseguir la salvación como también la acumulación de riqueza personal que debe ser compartida con los pobres.
La relación que existía que la dedicación al trabajo no podía contemplarse o tomarse en cuenta como una cuestión de preferencias o de gusto sino como un derecho ciudadano y un derecho político, al mismo tiempo, la contemplación intelectual o la política forma parte del ciudadano libre, que en todo momento puede decidir en libertad la ocupación de su tiempo.
En cuanto al valor intrínsico del trabajo que los primeros cristianos conceden al trabajo y efectúan una exaltación de la vida espiritual y contemplativo, como manifestación clara del no trabajo para el Islamismo es contemplado como una obligación social que hay que cumplir para estar bien con los demás y con Dios, el trabajo en relación de las dos perspectivas diferentes y en una buena medida independiente el trabajo como deber y como derecho del individuo. Es decir, la consideración de la creencia que tienen las personas sobre los derechos y obligaciones del trabajador y de la sociedad respecto al mundo del trabajo.
El trabajo como deber de acuerdo con las creencias el trabajo es algo bueno mientras que el no trabajar es malo, las personas se deben realizarse a través del trabajo.
El trabajo como derecho esta consideración del trabajo como derecho se encuadraría en una visión del trabajo relativa a otro ámbito de la vida del sujeto, el trabajo no es más importante en la vida de una persona no más que el trabajo, la vida familiar, las libres relaciones sociales es un derecho individual, como deber que tiene para con la sociedad. El individuo debe ser productivo para la sociedad pero manteniendo un equilibrio entre la vida familiar y social.
El trabajo es valorado en la medida que la persona disfruta y se siente realizada, para Calvino el trabajo es voluntad de Dios, y que la acumulación de riquezas a través de él es signo de virtud. Los valores extrinseco del trabajo no se centra en la actividad laboral que realiza la persona sino en los aspectos que guardan relación con el contexto del trabajo en las cuales experimenta un control externo dependiendo de situaciones externas al propio individuo. Ellos nos llevan a valorar ciertos aspectos del contexto del trabajo como aspecto contractuales de la actividad laboral, las condiciones del trabajo, la compensación o las oportunidades del desarrollo de la carrera. Los valores extrínsecos inciden en el valor del trabajo, no como fin en si mismo sino como un medio para obtener otros fines como ejemplo: la remuneración económica.
Desde sus inicios los primeros pobladores los indígenas realizaban labores de subsistencia, caza, pesca y agricultura rudimentaria, para sobrevivir luego, con la llegada de otros pobladores como los españoles conquistadores, los cleros y los negros esclavos, donde se dio otro tipo de labores, tales como el trueque, en donde intercambiaban, animales, alimentos y especies, por oro y piedras preciosas, y también a la minería, y actividades de las ferias.
Al transcurrir el tiempo se fue evolucionando el trabajo de otro tipo, las grandes industrias, las construcciones, la manos calificadas, el intelectual, comercial, el agropecuario el ganadero.
Donde el grado educativo o la preparación del individuo es necesaria por ejemplo en épocas anteriores en nuestro país Panamá, con un sexto grado de educación primaria se podía ser maestro o policía, hoy en día para ser docente se requiere una serie de títulos y es difícil tener una plaza de empleo; y para ser Policía se requiere culminar un bachillerato para ingresar a la academia de Policía. Es necesario de contar con mano de obra calificada y especializada. Manteniéndose el trabajo como una actividad por derecho, obligatorio y responsable para suplir nuestra necesidades ayudando a los demás y mejorando nuestra calidad de vida.
La que consideramos que se logra desarrollar plenamente en el ambiente laboral en Panamá, es la función del trabajo es la Función Económica, porque Panamá es un país de servicio y donde todos tenemos que trabajar para poder sobrevivir y suplir las necesidades básicas, de adquirir bienes de primera necesidad y acceder a otros bienes de consumo.
Dónde la gran mayoría de los panameños y panameñas vemos el trabajo desde una perspectiva económica, seguridad de vida y control de nuestra propia vida, como también nuestra propia independencia y la elección de actividades de tiempo libre o un empleo extra. Esta función es propia o se aprecia en aquellos individuos pertenecientes a grupos o colectivos desfavorecidos social mente. Similitud con lo que acontece en Panamá, país lleno de riqueza, rico, y con una gran cantidad de personas pobres, y de extrema pobreza, marcando una gran desigualdad de distribución de la riqueza y la brecha entre pobres y rico. En fin todos tenemos la responsabilidad del derecho a trabajar por un sustento diario y para sentirnos bien con nosotros mismos y con el resto de la sociedad.
De las funciones que no tiene pleno desarrollo positivo en Panamá,
es la Función Fuente para Estructurar el Tiempo. Porque existen trabajos que no
les permiten a las personas convivir con sus familias, horarios extensos,
turnos nocturnos consecutivos, rotativos, alejados de la familia, afectando a
todos los del grupo familiar por la falta de convivencia.
Al transcurrir el tiempo se fue evolucionando el trabajo de otro tipo, las grandes industrias, las construcciones, la manos calificadas, el intelectual, comercial, el agropecuario el ganadero.
Donde el grado educativo o la preparación del individuo es necesaria por ejemplo en épocas anteriores en nuestro país Panamá, con un sexto grado de educación primaria se podía ser maestro o policía, hoy en día para ser docente se requiere una serie de títulos y es difícil tener una plaza de empleo; y para ser Policía se requiere culminar un bachillerato para ingresar a la academia de Policía. Es necesario de contar con mano de obra calificada y especializada. Manteniéndose el trabajo como una actividad por derecho, obligatorio y responsable para suplir nuestra necesidades ayudando a los demás y mejorando nuestra calidad de vida.
La que consideramos que se logra desarrollar plenamente en el ambiente laboral en Panamá, es la función del trabajo es la Función Económica, porque Panamá es un país de servicio y donde todos tenemos que trabajar para poder sobrevivir y suplir las necesidades básicas, de adquirir bienes de primera necesidad y acceder a otros bienes de consumo.
Dónde la gran mayoría de los panameños y panameñas vemos el trabajo desde una perspectiva económica, seguridad de vida y control de nuestra propia vida, como también nuestra propia independencia y la elección de actividades de tiempo libre o un empleo extra. Esta función es propia o se aprecia en aquellos individuos pertenecientes a grupos o colectivos desfavorecidos social mente. Similitud con lo que acontece en Panamá, país lleno de riqueza, rico, y con una gran cantidad de personas pobres, y de extrema pobreza, marcando una gran desigualdad de distribución de la riqueza y la brecha entre pobres y rico. En fin todos tenemos la responsabilidad del derecho a trabajar por un sustento diario y para sentirnos bien con nosotros mismos y con el resto de la sociedad.
Como también no permiten la incorporación de las personas con
discapacidad, al campo laborar o acceso al trabajo, que también tienen derecho
ejercer un trabajo de acuerdo a sus posibilidades y contribuir con los demás y
sentirse bien consigo mismo siendo útil a la sociedad, al igual mejorando su
calidad de vida.
De estas funciones la que presenta mayor sentido disfuncional en Panamá, consideramos que es la de fuente estatus y prestigio social, porque
nosotros no trabajamos para buscar respeto, trabajamos para sentirnos bien con
nosotros mismos y que nuestro esfuerzo
sea valorado por los demás y para mejorar nuestra calidad de vida en este mundo nuevo y contribuyendo a la obra
de nuestro creador y la riqueza que obtenemos por nuestro fruto del trabajo la
sepamos compartir con los más pobres.